lunes, 8 de septiembre de 2014

AYURVEDA, MANTENER EL EQUILIBRIO.


Ayurveda valora la vida en su totalidad: fisiológica, psicológica, ambiental, espiritual y considera todos estos aspectos interconectados, interrelacionados e interdependientes. Reconoce que cada individuo tiene su particular constitución y por ello aporta alternativas personalizadas. Aunque dos personas puedan presentar símptomas parecidos su constitución energética es diferente y por ello los remedios también deben ser particulares para cada uno de ellos. La ciencia Ayurveda se centra en establecer y mantener el equilibrio entre las energías vitales y los síntomas individuales y tiene sus raíces en la misma tradición espiritual que el yoga, la meditación... 
También colabora para que haya armonía y equilibrio entre la naturaleza y el individuo. El sistema ayurvédico enseña el conocimiento de los cinco elementos: la tierra, el agua, el fuego, el aire y el éter y los tres doshas del cuerpo humano. Busca con estos conocimientos el equilibrio en las relaciones con todas las criaturas, en la casa, en el trabajo, en el entorno, en la sociedad, con las ideas, las costumbres y el amor.

                      

Según la constitución de cada persona, ofrece un plan integral para mantener y/o restablecer el equilibrio mente-cuerpo en base a la alimentación, la actividad física, las rutinas cotidianas, la armonía mental
y el desarrollo espiritual, sumando el apoyo de hierbas medicinales y de técnicas de desintoxicación y rejuvenecimiento.


Tras mi viaje a India, he podido tener mas conociemientos de la medicina ayurvédica, el yoga y la meditación. Sabiendo lo importante que es la conexión con el universo.
Lleno de esperanzas, con nuevos propósitos y energías renovadas.. 
Así llego, dispuesto a seguir profundizando y ayudando a quien lo necesite.


El masaje ayurvédico es complejo y refinado, se adaptan a cada dosha o constitución individual. Se realizan con movimientos sincronizados.
Actúan tanto a nivel físico como mental, permitiendo la regeneración de todas las células del cuerpo. Reducen el envejecimiento y los procesos degenerativos, fortalecen el sistema inmune, producen un efecto desintoxicante y calmante, revitalizan piel, músculos y nervios y mejoran la resistencia al estrés. Además son muy efectivos contra el insomnio, el cansancio y la depresión.



2 comentarios: